(Leer antes de leer: si estás buscando una respuesta rápida y superficial de cómo sanar tus pajas mentales, quiero decir, tus problemas a la hora del sexo, entonces baja directamente al párrafo resaltado en rojo, no te enrosques leyendo todo esto.
Si por el contrario, necesitas ayuda en el terreno sexual pero a la vez quieres comprender el método y tomar consciencia, lee desde el principio)
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He analizado todos los mails, mensajes, comentarios, charlas con consultantes y amigos que he recibido todo este tiempo, y me di cuenta de cuál es la traba, denominador común en todas las historias: La mente.
Antes que nada debemos ser conscientes de que nuestra mente es otro ser, otra dimensión de ti. Un instrumento que debemos utilizar y no dejar que nos utilice a nosotros. La mente tiene un mundo compenetrado en el universo físico y material, pero ella, como ente que es, no puede existir a la vez que el SER.
El Ser es nuestra divina presencia que solo existe en el ahora continuo, está en armonía con su momento presente porque no lo juzga, es un observador vividor del momento.
La mente, en cambio, no tiene un anclaje físico como el cuerpo, que le permite disfrutar del momento presente. La mente necesita hacer que olvidemos lo que hay delante de nosotros llevándonos a otros mundos, mundos que sólo existen en la imaginación. Que existan en la imaginación es lo que los hace irreales. Traer la imaginación al mundo real es lo que los hace reales, pero para que eso ocurra, el Ser (tú mismo en tu versión más pura, también llamado doble cuántico) debe estar en el presente, libre de los juicios limitadores de la mente.
La mente para existir ocupa el espacio mental trayéndonos continuamente recuerdos del pasado, deseos e imaginaciones de posibles futuros, canciones que no paran de sonar en tu cabeza, miedos irracionales y dudas continuas, entre tantas cosas que inventa para distraerte.
Para que te hagas una idea de lo que estoy diciendo: imagina una persona que está embobada mirando la tele, absorta de su entorno, no se da cuenta de que a su alrededor está su ser más querido mirándole a los ojos y esperando que le preste su atención. Ese ser podría ser un familiar muy querido, una pareja amada, un hijo.
El embobado fugazmente tiene consciencia de lo que le rodea, lo vive como una somnolencia, mientras no quita los ojos de la pantalla.
La mente está activa todo el tiempo en nuestras vidas excepto cuando somos niños ya que los niños viven en un presente continuo. Ellos no son dominados por su mente. Para ellos todo es nuevo, prestan la máxima atención a lo que les rodea porque ¡están en el presente! No están juzgando si es bueno, si es malo, si es lindo, si es feo, etc., ellos están viviendo el momento sin plantearse nada. Eso es estar en el ser, vivir el AHORA.
*Ahora bien. Vamos a lo que nos ocupa: el sexo y la mente.
Mientras tu mente permanezca entrometiéndose en el momento del acto sexual, nunca estarás dando el 100% y no conseguirás disfrutar de la ocasión.
Vendrán tus miedos de siempre, tu forma negativa de ver la vida, tus juicios, etcétera, a arrebatarte el momento llevándote a tu mundo mental y no viendo, disfrutando o explorando el momento presente en este mundo físico.
Te pase lo que te pase a la hora del acto sexual, el 95 por ciento es mental y no existe. Para que me creas te compartiré un ejercicio que pondrás en práctica a la hora del sexo...
Ejercicio:
Cada vez que te venga un pensamiento negativo, intimidante, algo que vaya en contra tuyo, automáticamente elimínalo diciendo "Yo libero este pensamiento" y te centras en las sensaciones físicas que te están ocurriendo en ese preciso momento.
1-Observas la habitación y todo lo que te rodea, miras a tu pareja y contemplas cómo se mueve, y lo sexy que es, etc., observas los detalles con la vista.
2-Luego céntrate en lo que oyes, en su voz, en la música que suena, en los ruidos que hay, en tus propios gemidos, etc. Oyes con los oídos.
3-Ahora céntrate en lo que sientes al tocar y cuando te tocan; ten consciencia de todas las partes del cuerpo que se están rozando a la vez, de la temperatura del ambiente y de vuestros cuerpos, la piel, etc. Sientes con el tacto.
4-Es el momento de saborear el momento... El sentido del gusto.
5-Oler. Hace falta que lo explique?
El resumen de estos 5 pasos para centrarte en el ahora que te ayudarán a superar tus importunios(1) es el siguiente:
1-Mirar con la vista.
2-Oir con el oído.
3-Sentir con el tacto.
4-Saborea con el gusto
5-Huele con el olfato
Siéntete libre de alternar los pasos a tu manera, no hay un orden particular pero, sobretodo, recuerda utilizar tus cinco sentidos ya que así lograrás permanecer en el presente continuo y disfrutar del momento en vez de dejarte boicotear por tu mente.
Los he escrito de esa manera sencilla para que lo recuerdes mientras estás haciendo el amor.
Ponlo en práctica y luego me cuentas!
(1)Importunios es una palabra que no existe, me la he inventado, pero si la palabra "Importuno" es dícese de algo molesto, enfadoso o inoportuno, la palabra"importunio" es: lo que es molesto, enfadoso e inoportuno.
Si por el contrario, necesitas ayuda en el terreno sexual pero a la vez quieres comprender el método y tomar consciencia, lee desde el principio)
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He analizado todos los mails, mensajes, comentarios, charlas con consultantes y amigos que he recibido todo este tiempo, y me di cuenta de cuál es la traba, denominador común en todas las historias: La mente.
Antes que nada debemos ser conscientes de que nuestra mente es otro ser, otra dimensión de ti. Un instrumento que debemos utilizar y no dejar que nos utilice a nosotros. La mente tiene un mundo compenetrado en el universo físico y material, pero ella, como ente que es, no puede existir a la vez que el SER.
El Ser es nuestra divina presencia que solo existe en el ahora continuo, está en armonía con su momento presente porque no lo juzga, es un observador vividor del momento.
La mente, en cambio, no tiene un anclaje físico como el cuerpo, que le permite disfrutar del momento presente. La mente necesita hacer que olvidemos lo que hay delante de nosotros llevándonos a otros mundos, mundos que sólo existen en la imaginación. Que existan en la imaginación es lo que los hace irreales. Traer la imaginación al mundo real es lo que los hace reales, pero para que eso ocurra, el Ser (tú mismo en tu versión más pura, también llamado doble cuántico) debe estar en el presente, libre de los juicios limitadores de la mente.
La mente para existir ocupa el espacio mental trayéndonos continuamente recuerdos del pasado, deseos e imaginaciones de posibles futuros, canciones que no paran de sonar en tu cabeza, miedos irracionales y dudas continuas, entre tantas cosas que inventa para distraerte.
Para que te hagas una idea de lo que estoy diciendo: imagina una persona que está embobada mirando la tele, absorta de su entorno, no se da cuenta de que a su alrededor está su ser más querido mirándole a los ojos y esperando que le preste su atención. Ese ser podría ser un familiar muy querido, una pareja amada, un hijo.
El embobado fugazmente tiene consciencia de lo que le rodea, lo vive como una somnolencia, mientras no quita los ojos de la pantalla.
La mente está activa todo el tiempo en nuestras vidas excepto cuando somos niños ya que los niños viven en un presente continuo. Ellos no son dominados por su mente. Para ellos todo es nuevo, prestan la máxima atención a lo que les rodea porque ¡están en el presente! No están juzgando si es bueno, si es malo, si es lindo, si es feo, etc., ellos están viviendo el momento sin plantearse nada. Eso es estar en el ser, vivir el AHORA.
*Ahora bien. Vamos a lo que nos ocupa: el sexo y la mente.
Mientras tu mente permanezca entrometiéndose en el momento del acto sexual, nunca estarás dando el 100% y no conseguirás disfrutar de la ocasión.
Vendrán tus miedos de siempre, tu forma negativa de ver la vida, tus juicios, etcétera, a arrebatarte el momento llevándote a tu mundo mental y no viendo, disfrutando o explorando el momento presente en este mundo físico.
Te pase lo que te pase a la hora del acto sexual, el 95 por ciento es mental y no existe. Para que me creas te compartiré un ejercicio que pondrás en práctica a la hora del sexo...
Ejercicio:
Cada vez que te venga un pensamiento negativo, intimidante, algo que vaya en contra tuyo, automáticamente elimínalo diciendo "Yo libero este pensamiento" y te centras en las sensaciones físicas que te están ocurriendo en ese preciso momento.
1-Observas la habitación y todo lo que te rodea, miras a tu pareja y contemplas cómo se mueve, y lo sexy que es, etc., observas los detalles con la vista.
2-Luego céntrate en lo que oyes, en su voz, en la música que suena, en los ruidos que hay, en tus propios gemidos, etc. Oyes con los oídos.
3-Ahora céntrate en lo que sientes al tocar y cuando te tocan; ten consciencia de todas las partes del cuerpo que se están rozando a la vez, de la temperatura del ambiente y de vuestros cuerpos, la piel, etc. Sientes con el tacto.
4-Es el momento de saborear el momento... El sentido del gusto.
5-Oler. Hace falta que lo explique?
El resumen de estos 5 pasos para centrarte en el ahora que te ayudarán a superar tus importunios(1) es el siguiente:
1-Mirar con la vista.
2-Oir con el oído.
3-Sentir con el tacto.
4-Saborea con el gusto
5-Huele con el olfato
Siéntete libre de alternar los pasos a tu manera, no hay un orden particular pero, sobretodo, recuerda utilizar tus cinco sentidos ya que así lograrás permanecer en el presente continuo y disfrutar del momento en vez de dejarte boicotear por tu mente.
Los he escrito de esa manera sencilla para que lo recuerdes mientras estás haciendo el amor.
Ponlo en práctica y luego me cuentas!
(1)Importunios es una palabra que no existe, me la he inventado, pero si la palabra "Importuno" es dícese de algo molesto, enfadoso o inoportuno, la palabra"importunio" es: lo que es molesto, enfadoso e inoportuno.