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lunes, 4 de abril de 2016

¿Eres una persona objetiva?

La gente no aprende con el ejemplo de buenas acciones y costumbres. Solo los niños y las personas objetivas son capaces de aplicar los buenos ejemplos de los demás para sí mismos.
Hay muy pocas personas objetivas; si tu crees ser una de ellas te preguntaré: 
¿Qué te parece Justin Bieber? 
(Alto!!! Antes de seguir leyendo responde interiormente la pregunta)


Una persona objetiva contestará que Justin Bieber tiene un increíble talento para tocar el piano, bailar, cantar, componer canciones, tocar la guitarra, la batería y además, armar cubos de Rubik, a parte de eso es un arrogante, déspota y a veces se comporta como un gilipollas; también, que la música que hace es un poco mierda, demasiado comercial, pero tiene temas pegadizos que suenan bien; y si queremos explayarnos se resaltarán sus bellos rasgos físicos.

Esa es una opinión objetiva, que abarca la verdad de los hechos demostrados por el señor Bieber, le gusten o no a uno.

Una fan de Justin por lo general dará una opinión subjetiva (si la persona es subjetiva) y dirá que Justin es hermoso, que le encanta y ama todo lo que hace. Esta es una opinión subjetiva que 
sobrestima la verdad. 

Y una persona a la que no le guste Justin Bieber dirá que es un producto, que es un mierda y que hace una mierda de música, desvalorando la realidad. Esta es una visión subjetiva que subestima la verdad.

Ambas versiones subjetivas son limitadas, de mentes tercas que se basan en la ignorancia.
A uno le puede gustar más o menos o no gustar nada una cosa pero no por eso desvalorizar la verdad de los hechos.
Varias veces me he encontrado con gentuza que dicen que Lady Gaga es un producto y yo pienso "Sí, idiota, por eso se llama mercado de la música, y te guste o no, si quieres venderte te conviertes en producto", otra cosa es que seas un producto artificial y antes de hablar de cualquier cosa en la vida primero uno tiene que investigar un poco, tienes que haber visto varias presentaciones en directo de Lady Gaga (al menos en vídeo), tienes que ver qué hacía antes de ser tan famosa y has de reconocer su talento innato y sus capacidades y luego decir "Sí, es un producto, pero uno muy bueno" y cerrar el ojete, te guste o no su arte.
Lo mismo pasa con jugadores de fútbol, con actores y sin ir más lejos, con nuestros amigos y las personas que conocemos.

Una persona subjetiva por lo general guarda algo de envidia y frustración.
Las buenas acciones, ejemplos y el talento por un lado son apreciados por los que nos rodean y por otro a la vez, son envidiados.
Las personas objetivas no envidian sino que admiran porque al reconocer la verdad fuera pueden reconocerla dentro y ser capaces de desarrollar, gracias a reflejarse en los demás, sus propias capacidades.

Yo soy objetiva y eso me hace capaz de ver a las personas tal cual son, y cuando no me gusta lo que veo, tengo esperanza de que cambien o más bien de que se retracten. Les brindo una oportunidad más, ya que sino, tendría que admitir que el mundo es una mierda porque la gente que lo habita lo es y aún quiero pensar que no es así, que si yo puedo mejorar, los demás también pueden...

ACTUALIZACIÓN 2018: 
Luego, hay un enfoque mucho mejor que la objetividad, que es la BENEVOLENCIA. Esto es lo que enseñaba Jesucristo y hoy día enseña la ciencia a través de Garnier, con su teoría del desdoblamiento del tiempo. Es un paso más allá de ser objetivo, es quedarse con SOLO lo bueno de las personas, ya que al fin y al cabo, los demás son los espejos en dónde nos reflejamos a nosotros mismos y lo que vemos en el otro es nuestro claro reflejo; además de que, a lo que le damos foco, atención, crece, lo alimentamos.
¿Qué queremos alimentar?


domingo, 27 de septiembre de 2015

Todos somos iguales.


Todos en algún momento nos sentimos solos.
A todos nos gusta un abrazo cariñoso.
Todos necesitamos a alguien alguna vez.
Nadie quiere envejecer, pero todos deseamos llegar a la vejez.
Todos nos enamoramos.
Y todos un día lloramos.
Todos nos superamos y en algún momento fracasamos.
Todos perdemos, todos ganamos,
Todos en algo nos destacamos.
Todos comemos, cagamos, dormimos y follamos.
Todos nos queremos, nos odiamos, nos gritamos;
Festejamos, nos juzgamos, y por alguna razón nos emocionamos.
Todos tenemos algo o a alguien al lado;
Y todos, sin saber por qué, amamos. 
Todos creemos en algo.
Todos, inevitablemente, respiramos.
Todos deseamos, todos soñamos, 
Nos desilusionamos y algunos abandonamos.
Todos, de pequeños, queremos cambiar el mundo, 
Si bien la vida nos pasa y todo toma otro rumbo.
Todos, supuestamente, hemos elegido venir;
Todos estamos vivos, todos queremos ser feliz.
Todos, uno a uno, estamos destinados a morir,
Por eso hoy disfrutemos juntos, de esta ilusión que no tiene fin.



viernes, 11 de septiembre de 2015

La familia perfecta

El ser humano se creyó eso de la sociedad y se creyó también eso de la familia perfecta: con su mamá, su papá, y los hijitos, todos felices para siempre, sonriendo y comiendo alegremente a la luz de la leña de la hoguera...
¡Pura mierda!
Puro engaño para permanecer vibrando en energías bajas, para sentirnos desdichados porque nuestra familia no es perfecta. 

Ninguna familia es perfecta tal y como concebimos la perfección.
En todas las familias hay críticas, hay discusiones, hay luchas de egos, hay celos, hay envidias; y eso no es porque sea una familia, eso es porque la familia está compuesta por seres humanos que sienten y se dejan dominar por esas emociones.

Mi familia real, de sangre, es muy grande. 

Mi familia es una fiesta constante, donde se aprovecha cada oportunidad para hacer una joda (fiesta), para comer un asado, para tomar unos mates, para hacer un karaoke y divertirse, y para buscar un motivo de enojo o crítica, también. No importa, es parte de la vida misma.
Mis padres están divorciados y separados, mi abuela con mi abuelo también, y cuando hacemos reuniones familiares todos están juntos, con sus parejas y se lo pasan pipa. Faltan algunos papás, algunas mamás, faltan seres que se han ido al otro mundo, tengo una media hermana por aquí y un hermanastro por allá y los veo a todos juntos reunidos, riendo y celebrando y pienso "¡Que linda que es la vida, qué bueno es que todos podamos trascender ciertas cosas de la vida y seguir adelante juntos y poder ser felices ahora!" 

Yo, al vivir lejos de ellos, he aprendido a valorarlos un poco más, aunque siempre fui muy familiera.
Yo, al ver sus fotos desde lejos, sonrío y pienso "Qué suerte tienen, me habría gustado estar ahí". 
Yo, al verlos de nuevo después de 8 años y estar en una de esas fiestas con ellos pienso "Que hermosa y magnifica es mi familia, de una u otra forma lo hacen lo mejor que pueden. Qué afortunada soy de tenerlos como familia. Mi familia es perfecta tal como es."

Y faltan como 11 personas en esta foto...